Sabrina heredó esta silla de su abuela. Aprovechando que se mudó recientemente, decidió reciclarla para que forme parte de su nuevo hogar. Como pensó su casa en colores ocres y tierra, decidimos que la silla se integre como una más en el espacio que ocupará: su cuarto. Estos son las pequeños tesoros que me encanta rescatar, aquellos muebles que quizás para otros sean solo un detalle bien integrado al ambiente y para el dueño esconden un historia y un sentimiento de pertenencia.
Es tal cual lo escribis de mi silla, me encanta que lo hayan percibido por eso confie en ustedes!!! Quedo hermosa, ahora falta la mecedora!!! estoy ansiosa por ir a buscarlas
ResponderEliminarBesos
Sabri
gracias Sabri, que alegría que te guste! me pone super contenta. Te mando un beso grande!
ResponderEliminarHola, yo tengo una silla igual que se la habían regalado a mi mamá, me diste una idea para reciclarla y ademas le voy a hacer un decoupage.Gracias y un abrazo
ResponderEliminarAlcira